miércoles, 6 de febrero de 2013

La isla mágica

Paseamos hoy por uno de esos rincones únicos del planeta en los que el aislamiento del resto del mundo y un clima más que peculiar han creado, con el paso del tiempo, un micro-universo único y particular, con una extraña flora y fauna que no existe en ningún otro lugar de la Tierra.

Muchos conoceréis ya la isla de Socotra por ser un tema recurrente en los power points que recorren nuestras bandejas de entrada, pese a todo, es un clásico que no podía faltar en la sección de lugares increíbles del blog.
Socotra es la isla principal, junto a otras tres pequeñas islas, de un archipiélago que se encuentra en el océano Indico, justo en el cuerno de Africa. Unas diez mil personas viven repartidas en el archipiélago dedicándose mayoritariamente a la pesca y a la ganadería.
.
Fotografías de Martin Sojka
F0tografía de Osama Al-Eryani
.
Las islas pertenecen a Yemen, aunque por su privilegiada posición en el estrecho de Adén ha sido codiciada por muchos países en su historia. Fue de dominio portugués y británico e incluso se dice que el mismísimo Alejandro Magno la conquistó porque en ella había gran cantidad de aloes que servirían para la curación de heridas y enfermedades de sus soldados durante las campañas.
Socotra aparece por primera vez como Dioskouridou (en alusión a Dioscúrides) en una ayuda a la navegación, el Periplo por el Mar Eritreo, del siglo I. En las notas de la traducción que del mismo hiciera G.W.B. Huntingford, remarca que el nombre de Socotra no es de origen griego, sino que procede del sánscrito Dvipa Sukhadhara (“isla de la felicidad”).
Se calcula que la isla se separó de Africa allá por el Plioceno, cuando se abrió el golfo de Adén. El largo aislamiento geológico y el clima caluroso han creado una espectacular flora endémica con más de 300 plantas que no se encuentran en ningún otro lugar del globo.
.
Fotografías de Valerio Pandolfo
.
El clima en general es desértico tropical, con pocas lluvias, concentradas en el invierno y más abundantes a mayor altura que en las zonas costeras. Socotra tiene tres tipos de terrenos principalmente: estrechas planicies costeras, una meseta de piedra caliza con cuevas kársticas y las montañas Haghier. El clima es fuertemente monzónico, de junio a septiembre tradicionalmente la isla era inaccesible a causa de los fuertes vientos y el mal oleaje. En julio de 1999 un nuevo aeropuerto permitió el acceso a Socotra durante todo el año.
La formación vegetal más sorprendente de la isla se encuentra en los acantilados, al pie de las montañas. La vegetación allí está dominada visualmente por el árbol de pepino, Dendrosicyos socotrana, una subclase particular de la rosa del desierto, Adenium obesum subsp. socotranum y Euphorbia arbuscula. Más arriba, en las montañas, domina la dragonera de Socotra o árbol de la sangre del dragón (Dracaena cinnabari), con una copa en forma de paraguas. Su resina, la sangre del Dragón, se utiliza como tinte desde la antigüedad. También se encuentra en el archipiélago la Dorstenia gigas, una Moraceae pachycaule.
Al igual que ocurre con otras islas aisladas, los murciélagos son los únicos mamíferos nativos de la isla. Como contraste, la diversidad marina es muy grande, y se caracteriza por la presencia de especies originarias de las regiones biológicas próximas, el océano Índico occidental y el mar Rojo.
La mayoría de los habitantes de la isla viven todavía sin electricidad, agua corriente o carreteras pavimentadas. A finales de los años 90, se desarrolló un Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo dedicado a la isla. Los habitantes de Socotra crían ganado y cabras. En las islas se habla un idioma semítico propio, el soqotri, que está relacionado con otros idiomas de la península Arábiga como el Mahri y el Dhofari o Jibali.
La isla fue reconocida en julio de 2008 por la UNESCO como Patrimonio Mundial Natural.
.
Fotografías de Kate B. Dixon
Fotografías de x_serpico_x
.
.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario